Esta serie inició en forma de manga, en Noviembre de 1996, en la revista Weekly Shōnen Sunday, y adaptada al anime en Octubre del año 2000. La serie presenta una historia con elementos de los clásicos cuentos de hadas, si bien infantiles como de terror.
El primer episodio de Inuyasha presenta a la joven Aome Higurashi, una estudiante de secundaria que, por azares del destino, es llevada a la época feudal de Japón, donde su vida se entrelaza por un ser mitad demonio, mitad humano, llamado Inuyasha, y una perla que puede cumplir cualquier deseo, tanto a humanos como a demonios: La Perla de Shikon. La serie es relativamente constante, si bien se ve interrumpida a veces (pero sin llegar a ser prolongado) por algunos episodios de relleno.
Los personajes de la serie son de lo más diversos, lo cual hace que la serie sea todo menos insípida. Entre estos están una adolescente del mundo moderno, un híbrido mitad-demonio, mitad-humano irascible, un monje lujurioso, un niño demonio inocente, y una exterminadora celosa, cuyas personalidades no eclipsan sus impresionantes habilidades.
La animación, aunque algo anticuada (lo cual es un tanto obvio, considerando cuándo salió al aire la serie), es razonablemente admisible, si bien se pueden observar de tanto en tanto errores en coloraciones y/o movimientos. La banda sonora emplea elementos de clásica música japonesa, y si bien esto se pierde parcialmente en las escenas cómicas de la serie, esto no impide que dichos momentos sean igualmente disfrutables al oído. Las canciones introductorias para cada temporada también son dignas de atención, tanto por el sentimiento positivo que transmiten las melodías, sino que también por las líricas.
Recomendaría esta serie por varias razones. La principal es porque, al contrario de la visión hasta cierto punto cerrada, intolerante, y prejuiciosa de la cultura occidental, la serie presenta a los demonios similares a los humanos: como seres complejos que pueden ser buenos, malos o imparciales. Un elemento recurrente es precisamente la discriminación de parte tanto por los humanos como por los demonios hacia los denominados mitad-demonio, elemento que siento muy similar al racismo en la vida real: donde se juzga el origen o apariencia de una persona, sin considerar sus sentimientos, objetivos, y potencial. Otra de las razones por la cual recomiendo la serie es porque, aunque presenta elementos de acción épica, estos se ven razonablemente complementados por elementos cómicos, románticos, y dramáticos, lo cual hace que sea constantemente entretenido, incluso en los escasos episodios de relleno. Por último, la recomiendo porque todos los personajes principales presentan múltiples inseguridades que son abordadas de una manera relativamente constante, pero que son menguadas gracias a los fuertes lazos de amistad, perseverancia, y amor que existen dentro del grupo, los cuales ayudan de sobremanera en los momentos más críticos de la historia de una manera coherente, y sin deus ex machina.
José Leal
